Al entrar en el segundo año de la pandemia de COVID-19, ¿cuán devastadores son sus impactos en los objetivos globales? ¿Pueden los ODS guiar a la comunidad global hacia un futuro mejor? Estamos en una coyuntura crítica, donde la tragedia de COVID-19 debe servir como llamada de atención para que el mundo trabaje juntos para lograr los objetivos globales. Mientras ONU DAES se prepara para lanzar el Informe de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2021 en el Foro Político de Alto Nivel, aquí hay 6 cosas que necesita saber sobre el estado de los ODS.

1. COVID-19 detuvo o revirtió años, o incluso décadas, de progreso en el desarrollo

La pobreza mundial aumentó por primera vez en más de 20 años. Más de 100 millones de personas volvieron a caer en la pobreza extrema y el hambre crónica. Se perdió el equivalente a 255 millones de trabajos de tiempo completo y 101 millones de niños adicionales han caído por debajo del nivel mínimo de competencia lectora.

2. La pandemia ha puesto de manifiesto e intensificado las desigualdades

Los más pobres y vulnerables corren un mayor riesgo de infectarse por el virus y han sido los más afectados por las consecuencias económicas. La distribución de vacunas ha sido un espejo de las desigualdades mundiales: al 17 de junio de 2021, se administraron alrededor de 68 vacunas por cada 100 personas en Europa y América del Norte, en comparación con menos de 2 en África subsahariana.

3. La recesión económica no frenó las crisis climática, de biodiversidad y de contaminación.

Las concentraciones de los principales gases de efecto invernadero siguen aumentando. El mundo se quedó corto en los objetivos para 2020 destinados a detener la pérdida de biodiversidad, mientras que cada año se siguen desechando 5 billones de bolsas de plástico de un solo uso.

4. Los gobiernos, el sector privado, el mundo académico y las comunidades han demostrado una notable capacidad de recuperación y acción

Los gobiernos anunciaron más de 1.600 nuevas medidas de protección social. Científicos de todo el mundo han trabajado juntos para desarrollar vacunas que salvan vidas en un tiempo récord. Y una transformación digital mundial ha cambiado la forma en que interactuamos, aprendemos, trabajamos y hacemos negocios.

5. Nuestro futuro está en nuestras manos y los próximos meses serán fundamentales

Nuestra respuesta colectiva durante los próximos 18 meses determinará si la crisis del COVID-19 sirve como una llamada de atención muy necesaria para impulsar una década de acción verdaderamente transformadora que rinda frutos para las personas y el planeta.

6. Mejores datos nos guían en la lucha contra el COVID-19 y el logro de los ODS

Los datos oportunos y de alta calidad son más esenciales que nunca. Los responsables de la toma de decisiones deben tratar los datos como un activo estratégico y una prioridad para reconstruir mejor y aumentar el financiamiento de datos de recursos nacionales e internacionales.